HudBay se retira de Guatemala
Published by MAC on 2011-08-23Source: Notimex, PRENSA LIBRE.COM
La compañía canadiense venderá a Solway Group proyecto de explotación de níquel en Izabal
La canadiense HudBay Minerals está por vender sus intereses en el proyecto Fenix, en Guatemala.
Casi con seguridad uno de los motivos del retiro fue el denunciado asesinato de un hombre y las violaciones a once mujeres en el área del proyecto en 2007. Ver: Mujeres Maya Q’eqchi presentan demanda contra minera canadiense por violaciones Y también Indígena guatemalteca demanda a minera canadiense Hud Bay por asesinato de su marido
Sin embargo, de acuerdo al abogado de las víctimas:"HudBay y HMI Nickel no pueden eludir las responsabilidades por sus acciones vendiendo el proyecto" y su demanda judicial continua en trámite.
Nota editorial: quien adquiere la mina de níquel y planta en Guatemala es una pequeña y poderosa banda de inversores - la mayoría rusos - conocida como Solway Investment Group, registrada en Cyprus.
Solway mantiene una oficina en Peru desde 2007, para gestionar el avance de sus proyectos en América Latina.
En mayo de este año Solway invirtió US$500,000 en Coro Mining Corp, cuya principal propiedad es el resistido proyecto de cobre San Jorge en Mendoza, Argentina. Ver: Canadienses buscan reflote de la minería en Mendoza, Argentina Y también Multitudinaria marcha antiminera tomó la legislatura de Mendoza, Argentina
Compañía canadiense venderá proyecto de níquel en Izabal
La compañía canadiense Dubai Mineral venderá a su par Solway Group el proyecto de explotación de níquel en Izabal por aproximadamente US$170 millones.
PRENSA LIBRE.COM
11 de agosto 2011
IZABAL - "Aunque creemos que Fénix es un proyecto sólido que justifica su inversión no encaja con nuestra estrategia de concentrarnos en depósitos de pórfidos y sulfuros masivos volcanogénicos", declaró el gerente de HubBay Minerals, David Garofalo.
Solway Group se comprometió con HudBay Minerals a pagar US$140 millones al cierre de la adquisición y posteriormente otros US$30 millones.
HudBay Minerals, que posee activos en Norteamérica, compró la firma Norsemont Mining y en consecuencia un proyecto minero en Cusco, Perú.
El proyecto Fénix había paralizado sus operaciones en El Estor, Izabal, debido al desplome de los precios internacionales del mineral y a la crisis financiera mundial.
Centenares de pobladores, empresarios y las autoridades locales abogaron por la reapertura del proyecto puesto que era la única fuente de empleo formal de la localidad. Fénix fue construída por un costo de US$238 millones en 1977.
Busca comunidad indígena ayuda internacional por justicia en Guatemala
Notimex
22 de agosto 2011
Una comunidad indígena pidió protección internacional para velar por sus derechos humanos y colectivos de propiedad sobre la tierra en Guatemala, informó hoy el Centro de Recursos de la Ley Indígena.
La comunidad de Agua Caliente, de población maya q'eqchi', de aproximadamente 385 personas en El Estor, en el departamento de Izabal, presentó el viernes pasado una petición contra el Estado de Guatemala ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
En febrero de 2011, el Tribunal Constitucional falló a favor de Agua Caliente y reconoció el derecho de propiedad de la comunidad, lo cual implica que las actividades y permisos de explotación minera en su tierra constituyen una violación de sus derechos sobre la tierra.
El Estado de Guatemala “no ha cumplido con sus obligaciones legales ante el Tribunal”, dijo Leonardo Crippa, abogado del Centro en un comunicado.
“Hemos agotado todos los recursos legales internos, ahora sólo tenemos una opción, pedir intervención internacional”, agregó.
El gobierno de Guatemala otorgó a la Compañía Guatemalteca de Níquel (CGN), ex subsidiaria de la empresa canadiense HudBay de Canadá, los derechos para iniciar la explotación de níquel en el territorio de 16 comunidades maya q’eqchi’, incluida Agua Caliente, según el Centro.
La comunidad indígena denunció violación de los derechos pertenecientes a la tierra, recursos naturales, libre determinación, autogobierno, debido proceso legal y protección judicial.
La petición se centra en una disputa de 40 años sobre los derechos de propiedad tradicionales de la comunidad en un territorio rico en concentraciones de níquel.
Por medio de la CIDH, Guatemala debe cumplir con su obligación de “salvaguardar los derechos humanos” y adoptar medidas de protección que se ajusten a los estándares internacionales, señaló Crippa.